- El diagnóstico de la ictericia implica la utilización de diversos métodos clínicos y paraclínicos. Dentro de los principales se encuentran:
- Anamnesis: Se indaga acerca de los antecedentes patológicos del paciente, medicamentos de uso rutinario, hábitos nutricionales, viajes internacionales recientes, conductas que conlleven riesgo elevado y existencia en la familia de cuadros ictericia o enfermedades hepáticas, también buscar otros signos asociados como heces hipocólicas, orina colúrica, astenia, anorexia y malestar general.
- Examen físico: Se ejecuta una valoración física integral, poniendo énfasis en signos cardinales de ictericia como coloración amarillenta de piel y mucosas, palidez, petequias, entre otros.
- Pruebas complementarias: Pueden solicitarse exámenes de laboratorio, tales como cuantificación de bilirrubina sérica total y fracciones, biometría hemática completa, Coombs directo y tipificación sanguínea. Asimismo, pueden indicarse estudios de imágenes, ecografía o tomografía axial computarizada, para descartar obstrucciones a nivel de la vía biliar.
- El diagnóstico de ictericia se establece ante la presencia de pigmentación amarilla anormal de piel, escleras y mucosas. El examen físico también busca otros signos asociados como heces hipocólicas, orina colúrica, astenia, anorexia y malestar general.
- Con el fin de determinar la etiología de la ictericia, pueden solicitarse diversas pruebas:
- Perfil hepático con cuantificación de bilirrubina sérica y otras enzimas.
- Ecografía abdominal para valoración estructural y funcional del hígado y vías biliares.
- Tomografía axial computarizada o resonancia magnética para mejor caracterización hepática y de conductos biliares.
- En determinados casos, puede ser necesaria la biopsia hepática para análisis histopatológico.
- Perfil hepático con cuantificación de bilirrubina sérica y otras enzimas.
Signos y síntomas generales
Como diagnosticar la ictericia.
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